Pato Aventuras 1#: El ladrón.
Ah, los rateros. Es horrible el momento en el que te asaltan o roban algo a tus espaldas (las malditas plumas de gel en la escuela), pero ya como anécdota suena increíble o divertida.
El personaje principal de la pato aventura de hoy es mi madre. Oh, bella mujer.
Antes de entrar a la escuela, cómo los primeros días de agosto, mi madre fue a comprar los útiles y algunas cosas necesarias para la escuela: zapatos negros, boleadores, estuche, plumas, lápices, cuadernos, etc.
Ese día, no tengo ni la menor idea de por qué, yo no iba con ella, entonces iba sola y con un titipuchal de cosas. Cómo tenia que tomar dos camiones para llegar a la casa se bajo en una tienda para cruzarse al otro lado (cómo la gallina) y tomar el siguiente camión. Pero entonces su celular sonó. Y mi madre contestó y se entretuvo platicando un buen rato (mal hecho).
De repente que siente algo puntiagudo en la espalda y alguien le susurro: "Dame todo lo que traigas".
¡Puta! Si de por si mi madre es asustadiza con eso más.
Se dio la vuelta y vio al ratero, ladrón. No me sé la descripción física pues no recuerdo que mi madre me la haya contado entonces a ustedes tampoco la conocerán.
El ratero le dijo que le diera lo típico: bolsa, cartera, dinero, cosas a la mano y el celular. En realidad la frase que le dijo fue: "Dame dinero".
Mi madre, en una situación normal, le hubiera dado todo y chingar a su madre pero cómo había ido por útiles y esas cosas se le había acabado el dinero y no llevaba cosas de valor en la bolsa pues debía de ir vacía para meter las cosas.
Entonces ella trató de razonar con el ratero diciendo, pues, la verdad: "Oye, no traigo dinero. Sólo traigo los zapatos de mi hija y algunos cuadernos para la escuela". El ladrón los tomó. Mi madre trató nuevamente con el: "Los zapatos de mi hija no te van a servir. Ni tampoco los cuadernos y útiles. Si los vendes no vas a ganar nada". Esta vez, el ratero tuvo un poco de piedad o corazón y le devolvió las cosas y le dijo: "Ten, pero dame dinero".
¡Y otra vez la burra al trigo, casi le dijo mi madre! Y le dijo nuevamente: "Pero no traigo dinero, ese es el problema". Y como mi madre había estado hablando por teléfono el ladrón se lo había visto y se lo pidió. Mi madre con tal de ya librarse de el se lo dio y el ladrón se dio a la fuga.
Es divertido pues siempre que mi madre quiere mandarme por algo le digo: "Dame dinero" y se acuerda del ratero. Jo jo jo.
Lo que no es divertido es que los que estaban cerca de ella, en la tienda, parecían haber visto todo y no dijeron nada. creemos que hasta conocían al ladrón. =(
Pero bueno, eso es todo de la pato aventura 1#.
¿Corta, no es cierto?
PD: En las pato aventuras no siempre estoy yo, pero como son las comedias familiares me entero de todos modos.